Al detenerme a observar la foto, en la
cual aparece una Cruz grabada, no es difícil identificar a quién
pertenece, Jesús mismo llamó a estos cristianos: ¡BIENAVENTURADOS!
Esta mano representa a muchos, muchos
cristianos que padecen persecución y que han decidido no ocultar su
Fe en el Señor Jesús. Aún en medio de la tribulación, declaran
públicamente su Identidad: ¡Somos Cristianos!, siendo ésta una de
las formas elegidas para hacerlo.
Cristianos fieles que con su testimonio
alborotan el mundo. Cristianos que se humillaron y se volvieron,
haciéndose como NIÑOS, para entrar en el Reino de Dios.
Sí, son cristianos que tienen la Fe de
un “niño”. Creen en Jesús. Creen en su Palabra.
Jesús dijo de estos cristianos:
Quien recibe a un NIÑO como éste a MÍ
me recibe.
¿Cómo crees que recibieron los
Discípulos las palabras de Jesús cuando les dijo que debían
humillarse y volverse como NIÑOS si querían entrar en el Reino de
Dios?
Y les dijo más aún:
Cualquiera que haga tropezar a uno de
estos “pequeños” que cree en Mí, (cristianos que se humillaron
y se hicieron como “niños”), mejor le fuera que se le colgase
una piedra de molino de asno y que se le hundiese en lo profundo del
mar. ¡Ay de aquel hombre por quien viene el tropiezo! Si tu pie,
ojo o mano te son ocasión de caer, córtalo y échalo fuera de ti.
Mejor es entrar en la Vida con un solo ojo, pie o mano y no con los
dos ser echado en el horno de fuego. (Mateo 18).
En oración y con la guía del Espíritu
Santo, medita:
¿Qué veo? ¿En qué utilizo mis
manos? ¿Por dónde camino? Debo consagrar mis ojos, manos, pies y
toda mi persona a Dios, para que Él pueda cumplir Su Voluntad en mí.
Si no es así, voy a tropezar y a ser de tropiezo a otros cristianos.
¿Cuál es tu decisión?
CONTINUARÁ
Elena Sanfilippo Ceraso
14/4/2017
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