Tiempos de Refrigerio: Siquem y Hebron

SIQUEM.

Significa ESPALDA u HOMBRO. Esta ciudad era conocida por ser un REFUGIO para los FATIGADOS.

Si estás en SIQUEM, es porque, gracias al SUMO SACERDOTE JESÚS, ya ingresaste a CEDES como PECADOR ARREPENTIDO.

Sí, eres un PECADOR ARREPENTIDO ¡FATIGADO!

FATIGADO: Trabajado, cansado, afanado.

¿Qué nos dice la Biblia acerca de los que padecen FATIGA?

Los que esperan en Jehová tendrán NUEVAS FUERZAS, LEVANTARÁN alas como las águilas, CORRERÁN y no se cansarán, CAMINARÁN y NO SE FATIGARÁN. (Isaías 40:30)

El Salmo 55:22, tiene una invitación para ti y una Promesa Divina:

ECHA sobre Jehová tu CARGA y

Él te SUSTENTARÁ.

Hermano/a: 

¿Estás cansado, fatigado…?

Acepta la Invitación Divina y corre a recostarte en el hombro o la espalda del Señor Jesús.

¡Él es el REFUGIO para los FATIGADOS! ¡BUSCA REFUGIO EN JESÚS!

HEBRON

HEBRON significa ASOCIACIÓN o COMUNIÓN. Esta ciudad era conocida por ser un REFUGIO para los DESAMPARADOS.

Si estás aquí, es porque eres un PECADOR ARREPENTIDO ¡DESAMPARADO!

Desamparado: desvalido, abandonado, dejado.

JESÚS VIVIÓ EN CARNE PROPIA ESTAR EN SITUACIÓN DE DESAMPARO. En Marcos 15:34, lo escuchamos CLAMAR a gran voz:

ELOI, ELOI, ¿LAMA SABACTAMI?

Esto significa: Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has DESAMPARADO?

Nunca, nunca, jamás, vamos a experimentar el estado de DESAMPARO que vivió Jesús, en la Cruz del Calvario, cuando cargó con los pecados de toda la humanidad. ¡Sólo Él experimentó el DESAMPARO TOTAL DE DIOS!

¡Cuántas PROMESAS tiene Dios para nosotros!

Como las aves que vuelan, así AMPARARÁ Jehová de los Ejércitos a ……………… (escribe tu nombre) AMPARANDO, LIBRANDO, PRESERVANDO, SALVANDO. (Isaías 31:5)

Tú, oh Dios, NO DESAMPARASTE a los que te buscaron. (Salmo 9:10)

En la Sombra de tus alas me ampararé. (Salmo 57:1)

Has sido mi AMPARO, mi REFUGIO, mi FORTALEZA.

A Ti CANTARÉ. (Salmo 59:16)

Y Pablo nos recuerda en 2° Corintios 4:9:

Perseguidos, mas NO DESAMPARADOS.

Hermano/a:

¡No estás DESAMPARADO! Dios tiene para ti, por medio del Señor Jesús, una Ciudad de Refugio, donde los Hermanos viven en ARMONÍA y en COMUNIÓN con Dios y unos con otros.

En Mateo 23:37, dice Jesús de Jerusalén, pero también es válido para ti, para mí, para toda persona:

¡Cuántas veces quise como la gallina, juntar sus polluelos debajo de sus alas…

Y NO QUISISTE!

¡Corre a AMPARARTE bajo la sombra de sus alas! No rechaces el AMPARO que Jesús te ofrece.

Dile: SEÑOR JESÚS AMPÁRAME, COBÍJAME, REFÚGIAME BAJO TUS ALAS.

CONTINUARÁ

(Elena Sanfilippo Ceraso
     jueves 01/09/2016)