De
su boca sale una ESPADA aguda para herir con ella a las naciones.
Apocalipsis 19:15.
SI
OYEREIS HOY SU VOZ, no endurezcáis vuestros corazones. Hebreos 4:7.
Jesús
continúa hablando HOY a través de la Santa Biblia, Palabras de Vida
Eterna, Palabras que son Espíritu y son Vida.
En
Juan 12:44, leemos:
YO,
la LUZ, he venido al mundo para que todo aquel que CREE EN MÍ no
permanezca en tinieblas.
Yo
no he hablado por mi propia cuenta, el Padre que me envió, Él me
dio Mandamiento de lo que he de decir y de lo que he de hablar. Y sé
que su mandamiento ES VIDA ETERNA. Las Palabras que Yo he hablado son
Espíritu y son Vida. Juan 6:63.
Pedro
respondió a Jesús, en Juan 6:67/68:
Señor,
¿a quién iremos? Tú tienes Palabras de Vida Eterna.
En
Juan 12:44 Jesús habla así:
El
que OYE mis Palabras y NO las guarda…, el que me rechaza y NO
recibe mis Palabras, tiene quien le JUZGUE: LA PALABRA que he
hablado, ELLA LO JUZGARÁ en el día postrero.
Juan
12:43/44, narra que muchos “habían creído” en Jesús pero no se
atrevían a confesar su Fe por TEMOR a ser expulsados de la sinagoga y
porque AMABAN más la gloria de los hombres que la Gloria de Dios.
En
Juan 8:31 Jesús dice a los judíos que “habían creído” en Él,
“qué” debían hacer para ser VERDADERAMENTE sus Discípulos:
-SI
ustedes PERMANECEN en Mi Palabra, serán VERDADERAMENTE mis
Discípulos y conocerán la VERDAD y la VERDAD los hará LIBRES.
Querido
Hermano, JESÚS ES LA VERDAD y quiere hacerte libre.
Regresemos
al texto. Estos judíos que “habían creído” en Jesús, le
respondieron:
-Nosotros
ya somos libres. Somos linaje de Abraham. Nunca fuimos esclavos de
nadie. ¿Cómo dices Tú: “seréis verdaderamente libres”?
Jesús
entonces les habló de la esclavitud al pecado y que sólo Él puede
LIBERTAR al hombre de la servidumbre al pecado.
¿Qué
hicieron estas personas “que habían creído” en Jesús, como
respuesta a sus Palabras?
Escuchemos
las Palabras que el mismo Jesús les dijo:
-“…procuran
matarme porque mis Palabras no hayan cabida en ustedes.”
Así
es, quien NO recibe la Palabra de Dios, no sólo la rechaza, sino que
busca la forma de acallar estas Palabras, matando al Señor Jesús, a
sus Discípulos, destruyendo la Biblia, etc.
Toma
tu Biblia, tienes en tus manos la Palabra de Dios que JUZGARÁ a los
hombres. Tal vez, a tí también.
¿Cuál
es tu relación con la Palabra de Dios? ¿La amas? ¿La guardas en tu
mente y corazón y permites que día tras día, por el Poder del
Espíritu Santo, seas transformado a imagen del Señor Jesús?
¿Puedes
decir como el salmista?:
Lámpara
es a mis pies tu Palabra y lumbrera a mi camino. Salmo 119:105.
Tu
Palabra es más dulce que la miel…Salmo 19:10.
El
HACER Tu Voluntad, Dios mío me ha agradado y tu Palabra está en
medio de mi corazón. Salmo 40:8.
Elena Sanfilippo Ceraso
Domingo
1 de julio del 2018
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