sábado, 25 de abril de 2015

Después de esta fidelidad. . . vino el enemigo.

Lectura: 2º Crónicas 31:20-21; 32:1-23 

Cuando Ezequías comenzó a reinar, inmediatamente restableció el culto del Templo, celebró la Pascua, reorganizó el servicio de sacerdotes y levitas. Ezequías ejecutó lo bueno, recto y verdadero delante de Jehová su Dios. En todo cuanto emprendió en el servicio de la Casa de Dios. . . buscó a su Dios, lo hizo de todo corazón y fue prosperado.
Quitó los lugares altos y derribó las imágenes. ¿Te acuerdas de la serpiente de bronce llamada Nejustán? (Números 21:7-9). El pueblo de Israel confesó su pecado ante Moisés de haber hablado mal contra Jehová y él, y le pidió que ruegue a Dios para que quite las serpientes ardientes que les había enviado como castigo. Estas los mordían y muchos morían. (No están seguros cuál habría sido la serpiente ardiente - quizas la vibora echis coleratus, "vibora carpeta".
a. Se encuentra en grandes cantidades en varias partes de Africa y Asia - En India se mataban 200,000 en un año.
b. Según la enciclopedia ilustrada de la Biblia de Zondervan El veneno de la serpiente es más potente por su peso, que el veneno de cualquier otra vibora.
c. También es una vibora muy nerviosa y agresiva). 
Moisés oró por el pueblo y Jehová le mandó que haga una serpiente ardiente de bronce y la ponga sobre una asta, cualquiera que fuere mordido y mirare a ella, viviría. Y así fue.



Bueno, pasó el tiempo, mucho tiempo y esa serpiente de bronce se había convertido en objeto de adoración. ¿Cuál fue la reacción de Ezequías? ¡La hizo pedazos! (¿Por qué?). Por el 2º mandamiento que Dios les dejó: "No te harás imagen, ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en el cielo, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra. No te inclinarás a ellas, ni las honrarás, porque yo soy Jehová tu Dios. . ." (Ex.20: 4-5).
Después de estas cosas y de esta fidelidad, vino Senaquerib, rey de los asirios. Invadió Judá y acampó contra las ciudades fortificadas, con la intención de conquistarlas. "Intención" es el propósito de hacer algo o conseguir un objetivo.


Preparación frente al enemigo

Viendo pues Ezequías, la venida de Senaquerib y conociendo su intención, con ánimo resuelto llevó esta situación ante el Dios de Israel y confió en Él. Proclamó públicamente la Palabra de Dios. Confesó victoria. Agradeció por anticipado la liberación. Declaró públicamente su fe en Dios y habló con su Palabra. Luego procedió a tomar consejo de sus príncipes y hombres valientes, para tomar urgentes medidas y así evitar el avance del enemigo. Cegó las fuentes de aguas que estaban fuera de la ciudad. Edifico muros. Alzó torres. Fabricó espadas y escudos. Puso capitanes de guerra sobre el pueblo.
Habló al corazón del pueblo: "Esforzaos y animaos, no temáis ni tengáis miedo del rey de Asiria, ni de toda la multitud que viene con él, porque hay más con nosotros que con él. Con él está el brazo de carne, mas con nosotros está Jehová nuestro Dios, para ayudarnos y pelear nuestras batallas".
Y el pueblo tuvo confianza.



Estrategias de guerra

En este caso el enemigo decidió sitiar a Ezequías, hasta lograr su completa rendición, confiando en su poder y en sus dioses.
Amenazó con arrojarle dardos de fuego, esto es: hambre, sed, saqueo, muerte, esclavitud, etc. Envió mensajeros para: declarar victoria sobre ellos en el nombre de sus dioses, ya que eran idólatras. Infundió miedo, pánico, verguenza, duda. Escribió y envió cartas blasfemando, maldiciendo a Jehová el Dios de Israel. Utilizó el mismo lenguaje en hebreo, apelando a los sentidos y pensamientos del otro, haciendo alarde de su poder. Buscó obtener la rendición incondicional. Desacreditó a Ezequías delante del pueblo. Contó victorias anteriores, grandes hazañas, etc., para demostrar su gran poder. Narró cuán grandes eran sus dioses y sus obras con otros pueblos (conquistas).


Ezequías se vistió con la armadura de Dios (Ef. 6:10-18)


Ante una situación tan dramática y viendo atacado a su pueblo, Ezequías no confió en su poder sino en Jehová de los Ejércitos. El rey Ezequías y el profeta Isaías oraron y clamaron a Dios. Proclamaron su Palabra. Por ejemplo en Zacarías 2:5 "Yo seré para mi pueblo muro de fuego en derredor, y para gloria estaré en medio de él.", en Jeremías 20:11 "Mas Jehová está conmigo como poderoso gigante."


Jehová libera a Ezequías


Y Jehová mandó un ángel que destruyó el campamento del rey Senaquerib, quien volvió avergonzado a Asiria. Al entrar en el templo de su dios, allí lo mataron a espada sus propios hijos.
Jehová le dio liberación y reposo a Ezequías y a Jerusalén por todos lados.
Pero no sólo eso. Muchos trajeron ofrendas a Jehová y ricos presentes al rey. Fue muy engrandecido delante de todas las naciones después de esto. Ezequías fue bendecido por su fidelidad y el nombre de Jehová fue enaltecido en todas las naciones.
"¡Den gloria a Jehová y anuncien sus loores en las costas!" (Isaías 42:12).

Meditación: 

Todos nacemos picados, mordidos por la muerte. El enemigo nos asedia con la intención de destruirnos. Pero, el que mira a Jesús levantado en la cruz del Calvario no muere, sino que tiene Vida Eterna.
Si estás en un estado deplorable, sitiado por serpientes ardientes buscando morderte, herido, sangrando hasta la muerte por dardos de fuego que el maligno te arroja, buscando tu destrucción, haz como el pueblo, que levantó sus ojos a Nejustán, imagen de Cristo y confesó sus pecados. En el instante en que la miraban, no morían aunque hubieran sido mordidos, sino que vivían.
Porque Jesús es el Dador de Vida.
Y si en tu desesperación, buscando una salida, una respuesta, corres ante imágenes o estatuas o lugares altos por un milagro. ¡No lo hagas! ¡Renuncia a ellas ahora!. Como Ezequías: ¡destrúyelas, hazlas pedazos! (aunque sean recuerdos muy queridos). 
El primer mandamiento de la Ley de Dios dice: "Yo soy Jehová tu Dios, no tendrás dioses ajenos delante de mí." Relee el segundo mandamiento. ¡Mira a Jesús crucificado!. Míralo a Él solamente, y tendrás Vida Eterna. Pues hay un solo mediador entre Dios y los hombres: ¡Jesucristo! (1ª Timoteo 2:5).
O, si después de esta fidelidad. . . vino el enemigo y estás atribulado, desfalleciente, tal vez sin darte cuenta, has bajado tus ojos. . . ¡Mira a Jesús crucificado!


Invitación:

Te invito a que creas en las promesas bíblicas: "Porque los que miraron a Él fueron alumbrados" (salmo 34:5).
"Mirad a mí y sed salvos todos los confines de la tierra, porque yo soy Dios y no hay más" (Isaías 45:22).
Vístete con toda la armadura de Dios, para que puedas estar firme contra las asechanzas del enemigo (Ef. 6:10-20).


Decisión Personal:


¡Mira al Señor crucificado y resucitado!





(Elena Sanfilippo Ceraso
    martes 28/04/2015)

sábado, 18 de abril de 2015

¡Ven!, Jesús te llama

Lectura: Marcos 10: 46-52


Bartimeo era ciego. No podía hacer otra cosa que mendigar para sobrevivir...¿Qué papel cumplía en la sociedad? ¿Quién era? No era nadie, no existía. Era sólo un ciego. Como “discapacitado” no gozaba de derechos ni había leyes que lo protegían, tampoco una fundación a la cual acudir a pedir socorro. Pero, a pesar de sufrir este desamparo, mantenía encendida dentro de él, la llama de la esperanza. No sabía cómo, pero tenía la certeza que un día iba a recobrar la vista y que su vida cambiaría definitivamente. Cada día soñaba con ese momento. Lo esperaba. Anhelaba llevar una vida normal, dejar de ser diferente, y, como todos, tener una familia, amar y ser amado,trabajar, ¡dejar de mendigar al fin!.
Un día, mientras estaba en el costado del camino mendigando, oyó que se acercaba una multitud. ¿Qué pasaría? Al enterarse que la gente seguía a Jesús con sus discípulos, de inmediato comenzó a gritar muy fuerte: -”¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí!” No hacía caso a las personas que lo reprendían para que callase... Ya estaba acostumbrado. Siempre había sido un estorbo para los demás. Tampoco se detuvo a pensar en quién era él para que Jesús lo atendiera. Continuaba llamando y clamando... Aún creía en un milagro para su vida.
De pronto, escuchó una voz que le decía: -”Ten confianza, levántate. Jesús te llama!”.
¡Sí!. Jesús lo había escuchado y lo llamaba. ¡Estaba interesado en él!.



DECISIONES DE FE

La primera decisión de Fe de Bartimeo fue ESPERAR el milagro de parte de Jesús, de sanidad de sus ojos. La segunda fue CLAMAR pidiéndole misericordia. La tercera fue decirle SI al LLAMADO de JESUS. La cuarta decisión fue ARROJAR su capa al recibir la invitación de Jesús. Estaba seguro de que ya no la necesitaba, porque su vida había cambiado con el llamado de Jesús. La arrojó al costado del camino, renunció a ella, ya no volvería a buscarla, formaba parte de su vida pasada, de ciego mendigo. No quería nada de esta triste vida, la arrojó antes del encuentro con Jesús. Quería comenar una Nueva Vida sin “recuerdos” de la anterior. Su decisión fue terminante. No se dejó llevar por el sentimentalismo, pensando, por ejemplo: Que esta capa lo había protegido, cubierto del frío, de la lluvia, del calor... Que ella escuchaba en silencio sus lamentos, sus temores, “su cansancio existencial”, que era testigo de su dolor agudo, de su soledad y que conocía sus más profundos deseos, temores...
¿Cómo no iba a amar a esta “capa guardadora de secretos”? Si formaba parte de su vida íntima, más que cualquier otra persona conocida o familiar. ¿Qué hubiera sido de él sin ella? Le debía tanto. ¿Cómo no llevarla con él siempre para agradecerle por el resto de sus días? ¿Cómo no ser él el que ahora la cuide? Hasta la guardaría en una cajita a la vista para recordarla siempre! ¡Qué momentos inolvidables pasaron juntos! Y así, comenzaría a encontrar lo “positivo” de esta oscura etapa de su vida. Después de todo... ¡No fue tan mala!
¡No,no y no! Cuando Bartimeo clamó: -¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí!, Jesús lo escuchó y lo mandó a buscar para liberarlo completamente, darle “Nueva Vida”, las cosas viejas pasaron, he aquí todas son hechas nuevas. De la vieja manera de vivir no debe quedar ningún “recuerdo”, porque pasaría a ser un lazo que lo ataría a la antigua vida. No la va a necesitar más. Jesús lo hizo libre por completo. Bartimeo no dudó ni tuvo temor al ridículo al arrojarla, ya no iba a regresar a buscarla. ¡Le creía a Jesús!.
La quinta decisión de Fe fue LEVANTARSE e IR AL ENCUENTRO de Jesús. Un discípulo lo acompañaba hacia Él.
Estas DECISIONES DE FE : Creer y esperar, clamar, arrojar, ir al encuentro, le permitieron responder a la pregunta clave, directa, sin rodeos de Jesús: -”¿Qué quieres que te haga?”.
Ya libre de la capa que lo ayudaba antes a sobrellevar su ceguera, pudo responder:
Sexta decisión de Fe: -“Maestro, que recobre la vista”.
Jesús le dijo:
- "Vete, tu fe te ha salvado." Y enseguida recobró la vista.
Todo pasó rápidamente en el Encuentro con Jesús.
Bartimeo había creído en Él, clamó a Él, estaba dispuesto a presentarse delante de Jesús sin muletas o falsos apoyos, a depender de Él totalmente y que Jesús fuera ahora “su capa”.


Y así ocurrió el milagro de liberación, de salvación, de sanidad. Había sido libre de su ceguera física y espiritual. Podemos comprender ahora la respuesta de Jesús: -”Vete. Tu fe te ha salvado”. Gran parte de su vida como mendigo, en un breve momento, con sólo seis palabras dichas por Jesús, le cambiaron la vida . Bartimeo comenzó una “Nueva Vida” en Cristo Jesús. Sí, Jesús no sólo le había devuelto la vista, sino que la dio la Salvación.
Séptima decisión de FE: En ese mismo momento, tomó otra decisión fundamental. Comenzaba para él una nueva vida, ya no iba a cumplir con sus viejos sueños, no... No deseaba alejarse de su Salvador. Su único deseo ahora era vivir la Nueva Vida, pero, en El Camino, ser su discípulo.


MEDITACION

Un 24/03/1985 Jesús envió a alguien para acompañarme ante El. Y en ese Precioso Encuentro cambió mi vida,la transformó completamente y me dio el “Nuevo Nacimiento”. Comencé a andar en El Camino que es Jesús y continúo, ¡gracias a Dios!.
El relato nos cuenta cómo Jesús conociendo las limitaciones de Bartimeo, envió a un discípulo para llevarlo ante su presencia.


INVITACIÓN

Si deseas ir al encuentro de Jesús, pero no puedes, clama a EL y te dará las fuerzas para emprender el camino. Te invito a que identifiques cuál es tu “capa”, que ya forma parte de tu vida, que te da seguridad, de manera que dependes totalmente de ella cada día, para sobrellevar una discapacidad, un problema, una dependencia.... Ella es un obstáculo para acercarte a Jesús. Pídele fuerzas a Él, para arrojarla lejos de tí, ¡ahora! Y corre a su encuentro para recibir Salvación, Sanidad, Liberación, ¡Nueva Vida en Cristo Jesús!
Vè a Jesús. El te está esperando con la pregunta. “¿Qué quieres que te haga?”
Sí, Jesús vino por tí, te ama. Quiere sanar ahora mismo tus heridas físicas, emocionales, espirituales. No temas, cree solamente. Pídele específicamente lo que quieres: -” Señor Jesús, quiero...”
Luego escucharás su respuesta: -”Vete, tu fe te ha salvado!”
¡Ya eres libre completamente!


DECISIÓN PERSONAL

Estoy orando por tí para que tomes la decisión de recibir la Nueva Vida que Jesús te da y seguir sus Pasos, siendo su discípulo.


PROMESA:”De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es, las cosas viejas pasaron, todas son hechas nuevas” (2ª Corintios 5:17).
    


(Elena Sanfilippo Ceraso
    sábado 18/04/2015)

martes, 7 de abril de 2015

Esta leve tribulación momentánea

¿Por qué para Pablo una tremenda tribulación es leve y momentánea?.
Pablo y Silas en Filipos. El pueblo se agolpó contra ellos, las autoridades ordenaron en su contra: que los azotaran mucho, los echaran en la cárcel con seguridad, y en el calabozo de más adentro, asegurándoles los pies en el cepo. ¡Estaban lastimados, sangrando, muy doloridos, en un calabozo oscuro e inmundo!.
Pero, ¿qué hacían Pablo y Silas?. ¡Oraban a Dios y cantaban himnos!. Y los presos oían. (Hch. 16)



Leemos en Romanos 12:12, que Pablo nos dice que seamos sufridos en las tribulaciones y constantes en la oración. Que las dos vayan juntas y de la mano, no es tan fácil. Ante la tribulación podemos dejar de orar y alejarnos de Dios. El decidir actuar como Pablo: ¨Porque por la mucha tribulación y angustia del corazón os escribí con muchas lágrimas acerca de mi amor por ustedes". (2ª Cor.2:4). En medio de tanto dolor consolar a otros, amarlos, ¿es posible?. ¿O ponemos toda nuestra atención en nosotros mismos y esperando en recibir de los otros?.
Aquí esta la llave, el secreto: ¡Bendecir a Dios y consolar a otros atribulados!.Dice Pablo: “Bendito sea el Dios y Padre de Nuestro Señor Jesucristo, Padre de Misericordias y Dios de toda Consolación, el cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación con que nosotros somos consolados por Dios." (2ª Cor. 1:3-5).
¿Y por qué debemos ser constantes en la oración? Para no desmayar. Y aunque el hombre exterior se va desgastando por la tribulación, el interior se renueva día a día.
Nos cuenta Pablo que en Asia fueron abrumados sobremanera, más allá de sus fuerzas, y perdieron la esperanza de conservar la vida. Pero depositaron su confianza en el Dios que resucita a los muertos, el cual los libró y los libra.(2ª Cor.1: 8-9). 
¿Puede la tribulación separarnos del Amor de Cristo?. Lee Romanos 8: 28-39. ¡No puede! Jesús Resucitado intercede por nosotros. Y aunque seamos muertos todo el tiempo y seamos contados como ovejas de matadero, ¡somos más que vencedores por medio de Jesús que nos amó!. Nada puede sapararnos del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor Nuestro. ¡Nada!.
La tribulación puede ser muy grande, pero Jesús quiere llenarte de su consolación, que sobreabundes de gozo, aunque tengas muchos problemas afuera y dentro muchos temores. Por eso, en medio de gran tribulación, recibamos la Palabra de Dios con gozo del Espíritu Santo. No permitamos que el diablo nos tiente y nos inquietemos, porque la Palabra predice que vamos a pasar por ellas. Es por gracia de Dios que en grandes pruebas abunde el gozo.
En Apocalipsis 1:9 dice: "Yo Juan, vuestro hermano y copartícipe vuestro en la tribulación, en el Reino y en la paciencia de Jesucristo, estaba preso en la isla de Patmos, por causa de la Palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo".
¿Te asombras por los mártires de Jesús a través de la historia y hoy mismo?.



El mismo Señor Jesús nos avisa: "Entonces os entregarán a tribulación y os matarán, y seréis aborrecidos de todas las gentes por causa de mi Nombre, muchos tropezarán y se entregarán unos a otros." (Mt. 24:9-10).
Pero, ¿quiénes tropezarán?. Los que oyen la Palabra y la reciben con gozo, pero no tienen raiz en sí, sino que son de corta duración, porque cuando viene la tribulación o persecución por causa de la Palabra, luego tropiezan. (Mc. 4:16-17).
Por eso, ¡nos gloriamos en las tribulaciones! (Rom. 5:3).
Porque es necesario que a través de muchas tribulaciones entremos en el Reino de Dios. (Hch. 14:22).

Meditación
¿Por qué Dios permite las tribulaciones? ¿Qué efecto producen en el cristiano sincero?.
Porque esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente eterno peso de gloria. No mirando las cosas que se ven, sino las que no se ven, pues las primeras son temporales y las que no se ven son eternas (2ª Cor. 4: 17-18). Y esto es fe: la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve. (Hbr. 11).
Por la fe en Jesús algunos experimentaron vituperio, azotes, cárceles. . . Fueron apedreados, aserrados, anduvieron de acá para allá, cubiertos de pieles de ovejas, angustiados, maltratados, de los cuales el mundo no era digno, errando por los desiertos, por los montes, por las cuevas de la tierra.
POR TANTO, NOSOTROS TAMBIÉN, PUESTOS LOS OJOS EN JESÚS, EL AUTOR Y CONSUMADOR DE LA FE, CORRAMOS CON PACIENCIA LA CARRERA QUE TENEMOS POR DELANTE. (Hbr. 12:1).

Invitación
Te invito a que conozcas a Helen Howarth Lemmel quien acudió a buscar el consuelo del Padre de Misericordias y Dos de toda Consolación. El fruto fue el himno "Fija tus ojos en Cristo" que a muchos nos consuela hoy.



Decisión Personal
A continuación te presento el himno citado. Ruego a Dios que decidas ahora fijar tus ojos en Cristo.



(Elena Sanfilippo Ceraso
    martes 07/04/2015)

domingo, 5 de abril de 2015

Diccionario de la Iglesia Primitiva



MISA CRISMAL 01/04/2015


La misa crismal, presidida por el obispo y concelebrada con su clero, es la celebración en la que se consagra el Santo Crisma (de aquí el nombre de misa crismal) y bendice además los restantes óleos o aceites (para los enfermos y los que se van a bautizar).



La palabra crisma proviene del latín chrisma, que significa unción. El crisma es la materia sacramental con la cual son ungidos los nuevos bautizados, son signados los que reciben la confirmación y son ordenados los obispos y sacerdotes, entre otras funciones.


La consagración del crisma y la bendición de los otros dos aceites ha de ser considerada como una de las principales manifestaciones de la plenitud sacerdotal del obispo.
Ordinariamente esta misa se celebra, en la catedral de cada diócesis el Jueves Santo; pero, por razones de conveniencia pastoral, se puede adelantar a uno de los días de la Semana Santa.
Haberla fijado el Jueves Santo no se debe al hecho de que ese sea el día de la institución de la eucaristía, sino sobre todo, a una razón práctica: poder disponer de los santos óleos, sobre todo del óleo de los catecúmenos y del Santo Crisma, para la celebración de los sacramentos de la iniciación cristiana durante la Vigilia Pascual.



Así pues el Santo Crisma, es decir, el óleo perfumado que representa al mismo Espíritu Santo, nos es dado junto con sus carismas el día de nuestro bautizo y de nuestra confirmación y en la ordenación de los sacerdotes y obispos.
La materia apta para el sacramento debe ser aceite de oliva. El crisma se hace con óleo y aromas o materia olorosa.
Es conveniente recordar que no es lo mismo el Santo Crisma que el óleo de los catecúmenos y de los enfermos (que sólo son bendecidos, como se ha dicho más arriba).



El rito de esta misa, de la misa crismal, incluye la renovación de las promesas sacerdotales. Tras la homilía, el obispo invita a sus sacerdotes a renovar su consagración y dedicación a Cristo y a la Iglesia. Juntos prometen solemnemente unirse más de cerca a Cristo, ser sus fieles ministros, enseñar y ofrecer la eucaristía en su Nombre y conducir a otros a Él.


Por tanto otro tema importante de la misa crismal es el sacerdocio. Al entregar el misterio de la eucaristía a la Iglesia, Cristo instituyó también el sacerdocio.
Los textos de la misa presentan un conjunto catequético no solamente acerca del sacerdocio ministerial, sino también relativo al sacerdocio general de los fieles: en la antífona de entrada, la asamblea aclama: "Jesucristo nos ha convertido en un reino, y hecho sacerdotes de Dios, su Padre".

sábado, 4 de abril de 2015

Obra completa de Agustín de Hipona en español – 33 pdf


Obra completa de Agustín de Hipona traducida al castellano bajo Biblioteca de Autores Cristianos (BAC), Madrid. Contiene 33 PDFs de 41 volúmenes (faltan los libros IV, VII, VIII, XIa, XIb, XII, XXXI, XXXII y XLI):
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, I. Escritos filosóficos (1.º). Introducción general y primeros escritos (BAC, Madrid, 1962-1969).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, II. Las confesiones (BAC, Madrid, 1974-1979).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, III. Escritos filosóficos (2.º). Obras filosóficas (BAC, Madrid, 1962-1947).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, IV. Escritos apologéticos (1.º) (BAC, Madrid).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, V. Escritos apologéticos (2.º). Tratado sobre la Santísima Trinidad (BAC, Madrid, 1956).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, VI. Escritos antipelagianos (1.º). Tratados sobre la gracia (1.º) (BAC, Madrid, 1949-1956).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, VII. Escritos homiléticos (1.º), 1-50. Sobre el Antiguo Testamento (BAC, Madrid).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, VIII. Cartas (1.º), 1-123 (BAC, Madrid).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, IX. Escritos antipelagianos (2.º). Tratados sobre la gracia (2.º) (BAC, Madrid, 1952).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, X. Escritos homiléticos (2.º). Sermones (2.º), 51-116. Sobre los evangelios sinópticos (BAC, Madrid, 1983).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XIa. Cartas (2.º), 124-187 (BAC, Madrid).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XIb. Cartas (3.º), 188-270 (BAC, Madrid).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XII. Tratados morales (BAC, Madrid).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XIII. Escritos homiléticos (3.º). Tratados sobre el Evangelio de San Juan (1-35) (BAC, Madrid, 1955).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XIV. Escritos homiléticos (4.º). Tratados sobre el Evangelio de San Juan (36-124) (BAC, Madrid, 1957-1965).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XV. Escritos bíblicos (1.º). Tratados escriturarios (BAC, Madrid, 1957).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XVI. Escritos apologéticos (3.º). La ciudad de Dios (1.º) (BAC, Madrid, 1958).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XVII. Escritos apologéticos (4.º). La ciudad de Dios (2.º) (BAC, Madrid, 1958).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XVIII. Escritos bíblicos (2.º). Exposición de varias epístolas; Índice general de conceptos de los 18 volúmenes (BAC, Madrid, 1958-1959).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XIX. Escritos homiléticos (5.º). Enarraciones sobre los Salmos (1.º) (BAC, Madrid, 1964-1958).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XX. Escritos homiléticos (6.º. Enarraciones sobre los Salmos (2.º) (BAC, Madrid, 1958-1965).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XXI. Escritos homiléticos (7.º). Enarraciones sobre los Salmos (3.º) (BAC, Madrid, 1958-1966).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XXII. Escritos homiléticos (8.º). Enarraciones sobre los Salmos (4.º) (BAC, Madrid, 1958-1967).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XXIII. Escritos homiléticos (9.º). Sermones (3.º), 117-183. Evangelio de San Juan, Hechos de los apóstoles y Cartas (BAC, Madrid, 1983).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XXIV. Escritos homiléticos (10.º). Sermones (4.°), 184-272 B. Sermones sobre los tiempos litúrgicos (BAC, Madrid, 1983).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XXV. Escritos homiléticos (11.º). Sermones (5.º), 273-338. Sermones sobre los mártires (BAC, Madrid, 1984).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XXVI. Escritos homiléticos (12.º). Sermones (6.º), 339-396. Sermones sobre diversos temas; Índices bíblico, litúrgico y temático de todo el Sermonario agustiniano (BAC, Madrid, 1985).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XXVII. Escritos bíblicos (3.º). Expresiones del Heptateuco; Espejo de la Sagrada Escritura; Ocho cuestiones del Antiguo Testamento (BAC, Madrid, 1991).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XXVIII. Escritos bíblicos (4.º). Cuestiones sobre el Heptateuco (BAC, Madrid, 1988-1989).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XXIX. Escritos bíblicos (5.º). Anotaciones al libro de Job; La concordancia de los evangelistas (BAC, Madrid, 1992).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XXX. Escritos antimaniqueos (1.º) (BAC, Madrid, 1986).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XXXI. Escritos antimaniqueos (2.º) (BAC, Madrid).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XXXII
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XXXIII. Escritos antidonatistas (2.º) (BAC, Madrid, 1990).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XXXIV. Escritos antidonatistas (3.º) (BAC, Madrid, 1994).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XXXV. Escritos antipelagianos (3.º). La perfección de la justicia del hombre; El matrimonio y la concupiscencia; Réplica a Juliano (BAC, Madrid, 1984).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XXXVI. Escritos antipelagianos (4.º). Replica a Juliano (obra inacabada) (Libros I-III) (BAC, Madrid, 1985).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XXXVII. Escritos antipelagianos (5.º). Replica a Juliano (obra inacabada) (Libros IV-VI) (BAC, Madrid, 1985).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XXXVIII. Escritos antiarrianos y otros (1.º). Escritos contra los arrianos y otros herejes (BAC, Madrid, 1990).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XXXIX. Escritos antiarrianos y otros (2º). Escritos varios (1.º) (BAC, Madrid, 1988).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XL. Escritos antiarrianos y otros (2.º). Escritos varios (2.º) (BAC, Madrid, 1995).
AGUSTÍN DE HIPONA – Obras completas, XLI. Escritos atribuidos (BAC, Madrid).
  • Algunas portadas (excepto VI, XV, XX, XXI, XXIII, XXV, XXVII, XVIII, XXIX, XXX, XXXI, XXXII, XXXIII, XXXIV).

miércoles, 1 de abril de 2015

Sígueme


Cuando fallece un joven entristece más que si lo hace una persona anciana. Podemos escuchar expreiones como:¡Qué lástima, no pudo disfrutar de la vida! ¡Le quedó todo por hacer!.
¿Por qué? ¿Está bien que la medida utilizada para determinar si alguien vivió bien o mal sea la cantidad de años vividos o la intesidad con que vivió?.
Quiero decir, que si alguien fallece a los quince años y otro a los noventa años, y ambos tienen en común el haber vivido lejos de Dios, deberíamos estar muy tristes por los dos, porque su destino final es el mismo.
Dijo el Señor Jesús:"Mi comida es que haga la Voluntad de mi Padre que está en el Cielo" (Juan 4:34). Y acabada su obra, murió a los treinta y tres años. ¡No importa si sólo tenía treinta y tres años! Vino a la tierra, acabó la obra que su Padre Celestial le dio que hiciera, entregó su vida, resucitó y regresó con Él.
Veamos otros ejemplos:
Pablo: Cuando Jesús lo derribó del caballo renunció a todo por amor a Él. Le encomendó la obra de llevar su Nombre a los gentiles, reyes y a los hijos de Israel. Dijo en 2ª Timoteo 4: 6-7. "Porque to ya estoy para ser sacrificado y el tiempo de mi partida cercano. He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe." Murió mártir.
Pedro: Jesús le dijo "Sígueme". Abandonó al instante su empresa familiar de pescadores y le siguió. Le fue encomendada la obra de ser "pescador de hombres". La noche en que el Señor Jesús fué entregado, Pedro lo negó tres veces. Pero se arrepintió muchísimo de haberlo hecho. Luego, se volvió atrás, al antiguo trabajo de pescador. Una vez resucitado, Jesús le dijo nuevamente: "Sígueme". Él aceptó y le fue encomendada la tarea de apacentar las ovejas y corderos del Señor (Juan 21: 15-19). Murió mártir.
Andrés, Jacobo y Juan: Eran pescadores. Jesús los vio trabajando. Los llamó y les dijo: "Venid en pos de Mí, haré que seáis pescadores de hombres". Abandonaron todo y le siguieron.
Demas: Aceptó el llamado de Jesús y su obra. Luego abandonó todo porque fue más fuerte el amor al mundo. (2ª Timoteo 4:10).
Figelo y Hermógenes: Le dijeron sí a Jesús, pero más adelante abandonaron. (2ª Timoteo 1:15).
Otros: Siguen a Jesús, realizan su obra. Pero con el tiempo, dejan de creer (Judas 1:5).
Judas: Fue discípulo del Señor. Era el encargado de la bolsa (dinero). Durante la Última Cena satanás entró en él, traicionó al Señor Jesús y lo entregó por treinta monedas de plata. Nunca se arrepintió.
El Señor Jesús continúa llamando. Es un llamado a cada persona en el mundo, sin distinción: Sígueme.
Y son muchos los que le dicen sí, aún a costa de perder su vida, según el lugar donde se encuentran. Podemos leer con fecha 31/01/2015 ACI/EWTN Noticias. Madrid. "De los 120.000 refugiados que huyeron del Estado Islámico (ISIS), ninguno perdió su fe cristiana, jamás se les ocurrió dudar ni preguntar ¿dónde está Dios?, ninguno se convirtió al Islám. En esta situación e una violencia tan brutal por parte del hombre, la presencia de Dios es más fuerte. Son mártires de la fe".

Domingo de Ramos entre los cristianos de Pakistán

Elena: El 24/03/1985, teniendo 24 años de edad, el Señor Jesús me dijo: Sígueme. Cada día le doy gracias por ser mi Salvador y Señor.

MEDITACIÓN
Lucas 12:8-9; Marcos 8:34-38.
Jesús te llama por tu nombre y te dice: Sígueme. El precio que pagó para que puedas recibir esta Invitación, fue muy alto: entregó Su Vida por tí, derramando Su Sangre Preciosa en la Cruz del Calvario. Sólo te pide: Sígueme

INVITACIÓN
Levanta la Bandera de Jesucristo. Muchos ya la tenemos en alto en todo el mundo. ¡No temas! ¡Haz tu opción por Cristo ahora!.




DECISIÓN PERSONAL
Que las palabras de Pablo sean las tuyas: "Porque para mí el vivir es Cristo y el morir es ganancia" (Filipenses 1:21).
Lee tu Biblia y ora diariamente. Dios te revelará por su Espíritu Santo cuál es su Voluntad para tu vida.



(Elena Sanfilippo Ceraso
     martes 31/03/2015)