sábado, 31 de octubre de 2015

Dame tu mano, Hermano.


A ti te escribo, Hermano mío, que estás padeciendo un desgaste físico- emocional diario, lento… por un montón de motivos diferentes.
Escuchemos el llamado de angustia que el salmista le hizo a Dios en el Salmo 120:
“Al Señor llamé estando en angustia y Él me respondió.
Libra mi alma, oh, Señor, del labio mentiroso, de la lengua fraudulenta. 
¿Qué te dará o qué te aprovechará, oh, lengua engañosa?, agudas saetas de valiente, con brasas de enebro.
¡Ay de mí, que peregrino en Mesech y habito entre las tiendas de Kedar!
Mucho se detiene mi alma con los que aborrecen la paz.
Yo soy pacífico, mas ellos así que hablo, me hacen la guerra”
El salmista llama angustiado a Dios porque está en peligro por la lengua fraudulenta y el labio mentiroso y le pide que lo libere.
¿Crees que exagera? Veamos cuál es el significado de “fraude”.
Es burlar los derechos de una persona, eludir las leyes en contra de alguien, engañarlo.
El salmista en su angustia llama a Dios. Está siendo víctima de personas fraudulentas y mentirosas. Así describe su estado físico – emocional:
Siente que arqueros le arrojaron saetas, cuyas puntas afiladas y con brasas encendidas penetraron en su cuerpo. ¡Qué dolor! Sentía que su cuerpo estaba lleno de heridas quemantes, ardientes. Se vio rodeado de arqueros expertos que hacían blanco en él. 



El salmista compara la lengua de los extraños con agudas saetas con brasa de enebro. ¡Cómo no iba a llamar a Dios por auxilio en semejante estado!
Veamos qué nos dice Santiago acerca de la lengua:
Es un miembro pequeño, pero se jacta de grandes cosas. He aquí cuán grande bosque enciende un pequeño fuego. Y la lengua es un fuego, un mundo de maldad. La lengua contamina todo el cuerpo. ¡Pero más, mucho más que eso! Inflama la rueda de la Creación, y ella misma es inflamada por el infierno.
Luego, dice Santiago, que el hombre es capaz de domar a la bestia más salvaje, pero no puede domar su lengua. La lengua es un mal que no puede ser refrenado, lleno de veneno mortal
¿Entiendes porqué el salmista se sentía morir? Porque la lengua de los hombres contenía veneno mortal. Esas saetas que le habían arrojado habían envenenado su cuerpo. Estaba herido de muerte. 
Luego continúa lamentándose delante de Dios:
¡Ay de mí, que PEREGRINO en Mesech y habito entre las tiendas de Kedar! ¡Estoy cansado!, le dice a Dios. Desde hace mucho tiempo vivo con extraños que aborrecen la Paz. ¡Líbrame Dios!


Veamos con quiénes vivía el salmista:
Mesech: Pueblo descendiente de Jafet. (Gén. 10:2) Vendían esclavos y utensilios de bronce en los mercados tirios.
Kedar: El segundo de los hijos de Ismael, como también de sus descendientes, la tribu de nómades o de beduinos que habitaban una región al norte de Arabia, (Gén. 25:13). Fue célebre por sus manadas de borregos y camellos, por sus tiendas de campaña, sus arqueros y telas. Algunos eran nómades y otros habitaban en aldeas.
Pero ahora vayamos al centro de la cuestión: ¿porqué el salmista sufre esta situación de vida?
¡Por que es PEREGRINO! ¿Y qué es un peregrino?
Es alguien que anda de un lugar a otro por TIERRAS EXTRAÑAS. Este hombre creyente, llama angustiado a Dios porque está cansado de peregrinar por tierras extrañas. Él va camino a la Patria Celestial, no pertenece aquí. Habita en medio de personas que no aman a Dios, sus lenguas no domadas están envenenadas y odian la Paz. Les gusta vivir de la guerra, someter, robar, engañar, mentir, violar acuerdos y leyes, ¡No lo respetan y hacen fraude contra él!
Luego hace una descripción de sí mismo: “YO SOY PACÍFICO”. Sí, él es un adorador de Dios. La Paz de Dios está en su corazón y Él ha santificado su lengua. Ama vivir en Paz.
Un hombre pacífico en medio de un pueblo guerrero. Un hombre de Dios en medio de un pueblo sin Dios. Un hombre peregrinando por tierras extrañas rumbo a la morada celestial que Dios tiene preparada para él. Un hombre rodeado por hombres extraños que comenzaron a arrojarle saetas con sus lenguas. ¿Y qué ocurre cuando intenta hablar con ellos? ¡No entienden razones! ¡Y le hacen la guerra!
¿Qué hace entonces el salmista? Muy angustiado ¡LLAMÓ A DIOS! Y nos dice que: ¡DIOS LE RESPONDIÓ!
Sí Hermano, sólo Dios puede librarte de la lengua fraudulenta y del labio mentiroso. A ti te escribo, que eres peregrino en tierras extrañas y que el mundo con sus leyes y formas de vida te es extraño. Estás angustiado, herido por sus saetas envenenadas que han entrado en tu cuerpo. Te roban, te saquean, hablan mentiras de ti, te calumnian, te humillan, estás cansado del oprobio. No hay justicia en el mundo para ti. ¡Llama a Dios!
El Salmo 56 es una oración de confianza:
“Todos los días pervierten mi causa, contra mí son todos sus pensamientos, para mal se reúnen. Se esconden. Miran atentamente mis pasos, como quienes acechan a mi alma. En el día que temo, yo en Ti confío. En Dios alabaré su Palabra. En Dios he confiado, no temeré. ¿Qué puede hacerme el hombre?".

*     *     *     *     *

Fortaleced las manos cansadas, afirmad las rodillas endebles. Decid a los de corazón opacado: Esforzaos, no temáis. He aquí que vuestro Dios viene con retribución, con pago, Dios mismo vendrá y os salvará." (Isaías 35:1-5).

Querido Hermano/a: Dame tu mano. Levántate. Fortalece tus manos cansadas y afirma tus rodillas. Esfuérzate y no temas. Ya viene Jesús a salvarnos. Él ha escuchado nuestro grito de angustia.
Lee y memoriza el Salmo 124. Medita:
“De no haber estado Dios con nosotros, vivos nos habrían tragado los hombres cuando se levantaron contra nosotros”
Y el Salmo 126 dice:
“Entonces nuestra boca se llenará de risa y nuestra lengua de alabanza. ¡Estaremos alegres!”
¡Sí! ¿Cómo no vamos a estar alegres? ¡Pega un cartel inmenso al lado de tu cama. (Salmo 34:7):
“EL ÁNGEL DE JEHOVÁ ACAMPA ALREDEDOR DE LOS QUE LE TEMEN. Y LOS DEFIENDE”.


Hermano/a: dame tu mano. Y peregrinemos juntos por estas tierras extrañas rumbo a nuestra Patria Celestial, siguiendo los Pasos del Señor Jesús. Él es nuestro Guía.
Recordemos sus palabras: “MI REINO NO ES DE ESTE MUNDO”.







(Elena Sanfilippo Ceraso
    sábado 31/10/2015)


viernes, 23 de octubre de 2015

Estamos invitados


"Acordaos de los presos como si estuviérais presos juntamente con ellos; y de los maltratados como que también vosotros mismos estáis en el cuerpo." (Hbr. 13:3).

Lectura: Hechos 3 y 4. 

La Biblia nos cuenta de los creyentes que perseveraban en la doctrina, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones, alabando a Dios y comiendo juntos con alegría y sencillez de corazón.
Predicaba Pedro acerca de la muerte y Resurrección del Señor Jesús y exhortaba: "Arrepentíos y bautícese cada uno de vosotros en el Nombre de Jesucristo para Perdón de los pecados y recibiréis el Don del Espíritu Santo."
Un día, cuando Pedro y Juan iban al Templo a orar, un cojo de nacimiento en la puerta del mismo, les pidió limosna. ¿Qué hicieron Pedro y Juan? Le dijeron:
- Míranos
Luego de obtener su atención, Pedro le dijo:
- No tengo plata ni oro, pero lo que tengo te doy: En el Nombre de Jesús de Nazaret, levántate y anda.


Lo tomó de la mano derecha y el hombre anduvo, y entró con ellos en el Templo andando, saltando y alabando a Dios. Y todo el pueblo al verlo y al escuchar su testimonio se llenó de espanto y asombro.
Dijo Pedro: "lo que tengo te doy. . ."
Y nosotros:
¿Qué tenemos? ¿Qué le damos a los que nos piden? ¿Se van saltando y alabando a Dios y testificando del Señor Jesús?.
Pedro no podía darle nada materialmente, pero tenía al Señor Jesucristo. El hombre recibió sanidad en el Nombre de Jesús y abandonó la mendicidad. Y no sólo eso, ¡alabó a Dios por que conoció al Señor Jesucristo!
Había estado mucho tiempo pidiendo en la puerta del Templo, recibiendo moneditas de los que entraban a orar a Dios. Hasta que Pedro lo vió y le entregó lo que tenía: ¡Jesucristo! ¡Y su vida cambió!.
Pero las autoridades del Templo estaban resentidas de que enseñaran al pueblo y anunciasen en Jesús la Resurrección de entre los muertos. Y los echaron en la cárcel y los interrogaron: 
- ¿Con qué potestad o en qué nombre hace ustedes esto? (Se referían a la sanidad del hombre cojo).


Entonces Pedro, lleno del Espíritu Santo, les habló de Jesucristo.
Luego de escucharlos, los intimaron a que de ninguna manera hablen ni enseñen en el Nombre de Jesús.
Pero Pedro y Juan respondieron:
- Juzguen si es justo delante de Dios obedecer a ustedes antes que a Dios.
Entonces, luego de amenazarlos, los soltaron.
Juan y Pedro, puestos en libertad, vinieron a los suyos y contaron todo lo que les había ocurrido.
¿Y qué hicieron los cristianos?. Se fue cada uno a su casa, o acordaron no hablar más, por un tiempo, del Señor Jesús, o que cada uno iba a tomar una decisión personal. . . 
¡No, no fue así!
Veamos qué hicieron:
"Y ellos habiéndoles oído, alzaron unánimes, todos juntos, la voz a Dios y dijeron: 

Soberano Señor, Tú eres el Dios que hiciste el cielo y la tierra, el mar y todo lo que en ellos hay, . . . 
Porque verdaderamente se unieron en esta ciudad contra tu Santo Hijo Jesús, a quién ungiste, Herodes y Poncio Pilato con los gentiles y el pueblo de Israel, para hacer todo cuanto tu Mano y tu Consejo habían antes determinado que sucediera, 
y ahora, Señor:
mira sus amenazas y concede a tus siervos que con todo denuedo hablen tu Palabra, mientras extiendes tu Mano para que se hagan sanidades y señales y prodigios, mediante el Nombre de tu Santo Hijo Jesús".

Sí, así oraron, estos creyentes, unánimes, solícitos en guardar la Unidad del Espíritu, en el vínculo de la Paz, Un Cuerpo y Un Espíritu, como fueron llamados en Una misma Esperanza, Un Señor, Una Fe, Un Bautismo, Un Dios y Padre de todos... (Efesios 4).



¡Tremenda oración! Cuando hubieron orado el lugar en que estaban congregados tembló y todos fueron llenos del Espíritu Santo y hablaban con denuedo la Palabra de Dios.
Estos creyentes habían orado guiados por el Espíritu Santo, de acuerdo a la Voluntad de Dios. Tenían claro que en esa ciudad se habían unido para actuar en contra de ellos, pero en realidad, estaban en contra del Señor Jesús. Pero no oraron para que Dios por medio de un milagro los librara de ellos, sino que oraron para predicar aún más su Palabra con Poder y Autoridad.
Jesús invita a su Iglesia y a cada cristiano a que hoy actuemos de igual manera que lo hicieron los cristianos de entonces, y vamos a experimentar el Poder del Espíritu Santo en nuestras vidas.

*     *     *     *     *

"Acerquémonos confiadamente al Trono de la Gracia, para alcanzar Misericordia y hallar Gracia para el oportuno Socorro". (Hbr. 4:16).
Estamos invitados para acercarnos confiadamente, sin dudas, con seguridad, al Trono de la Gracia. Dios nos está esperando, grande es su misericordia. No nos pide que llevemos nada, la Salvación es por Gracia, gratuita para todos. ¡Y quiere socorrernos!
Si aceptamos su Invitación de Amor, cada cristiano y la Iglesia que componemos, vamos a recibir una tremenda respuesta de Dios. Porque Él es el mismo, no cambia. Sí cambian las personas. Hoy, como entonces y siempre, religiosos y no creyentes, que se unen para destruir a la Iglesia de Dios y a cada cristiano, lo que buscan es derribar al Señor Jesús. Pero Dios quiere socorrernos. Solamente hay que acercarse confiadamente al Trono de la Gracia. ¡Sólo eso!
Luego, el mundo entero va a escuchar el Mensaje que Dios tiene para ellos a través de la Iglesia y de cada cristiano:
“Así que, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados, para que vengan de la Presencia del Señor “tiempos de refrigerio…Y en ningún otro hay Salvación, porque no hay otro Nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos”. (Hechos 3:19).


Hermano/a:
Si se han unido en contra de ti para hacerte mal, o como está ocurriendo hoy, se han unido en contra de la Iglesia de Dios, ESTAMOS INVITADOS a acercarnos confiadamente, sin dudar, al Trono de la Gracia. ¡Dios nos está esperando con Misericordia, Gracia y oportuno Socorro!
¡Acepta la invitación que Dios te hace por medio de Jesucristo! 
Luego, dile en oración:

“Padre Celestial, vengo delante del Trono de tu Gracia, por medio de Jesucristo, con confianza y en respuesta a tu Invitación de Amor, creyendo en lo que tu Palabra dice, que eres galardonador de aquellos que te buscan.
Vengo a Ti a buscar tu Misericordia, Gracia y el oportuno Socorro. ¡Ayúdame!, para que pueda darle a las personas mi Tesoro más preciado: Jesucristo.
Y delante de tu Presencia, te ruego por mis Hermanos Pequeños, Discípulos, Piedras Vivas, que están siendo atribulados, perseguidos, martirizados… No hay nada imposible para ti. Manifiéstate con Poder en sus vidas, allí donde y como estén: encarcelados, enfermos, hambrientos, sedientos… sean ancianos, huérfanos,…y por los que han dejado todo por no renunciar a su Fe en Jesús.
Te entrego toda mi vida. ¡Úsame! Me arrepiento de ser individualista, egoísta, de pensar sólo en mis necesidades personales… Te pido perdón por no orar por mis Hermanos en el mundo, por los cuales también Jesús murió y Resucitó.
Ayúdame a que solo y en compañía de Hermanos en la Fe, pueda orar con perseverancia, amor, compasión por mis Hermanos sufrientes. 
Te agradezco por ser un privilegiado y por la libertad que hoy tengo para leer la Biblia, orar, testificar, etc. En el Nombre de Jesús. Amén".







Elena Sanfilippo Ceraso.
    (Martes 20-10-2015)

sábado, 17 de octubre de 2015

La Iglesia Anglicana, una Iglesia a la vez Católica y Reformada




Somos parte de la Iglesia Una, Santa, Católica y Apostólica fundada por Nuestro Señor Jesucristo.
Católicos, porque todas nuestras enseñanzas son las de la Iglesia primitiva e indivisa (de allí el termino griego "katholikos", que significa "universal"), tal como están compiladas en los Siete Concilios Ecuménicos y los Credos Apostólico y Niceno-Constantinopolitano.           
Apostólicos, porque mantenemos el Episcopado histórico en legítima e ininterrumpida sucesión; siendo además una comunidad sacramental y litúrgica.
No romanos, porque no estamos sometidos a la autoridad del Papa, obispo de Roma, ni creemos en su infalibilidad.
Reformados, hace alusión, principalmente, a la Reforma religiosa del siglo XVI, dado que nos identificamos con muchos de sus postulados teológicos bíblicos.




La fe católica como la enseñamos tiene que ajustarse a tres criterios: La Santa Biblia, la Tradición Apostólica y la Razón, iluminada por la fe.

La Santa Biblia
Es la fuente y autoridad de toda doctrina. Creemos que las Escrituras contienen toda la doctrina necesaria para la salvación, y que nada que no esté explícita o implícitamente en ellas es considerado como artículo de fe, ni necesario para la salvación. Tanto el Antiguo como el Nuevo Testamento contienen la Revelación de Dios a los hombres, y son, por tanto, la Palabra inspirada del mismo Dios.
La Tradición Apostólica
Nos ayuda a interpretar la Escritura y se subordina a ella. Nos permite conocer como los primeros cristianos interpretaban y vivían la fe.
La Razón iluminada por la fe
Nos ayuda a entender y aplicar en situaciones específicas la doctrina y práctica de la Iglesia. 

¿En qué nos diferenciamos del catolicismo romano?
En realidad es el catolicismo romano quién se ha ido diferenciando paulitanamente con sus innovaciones del catolicismo apostólico:
  • Año 1123: Celibato del sacerdocio declarado obligatorio. (Sabemos que en la Iglesia Oriental es optativo y, en Occidente, recién se hizo plenamente obligatorio en 1545 en el Concilio de Trento).
  • Año 1439: Purgatorio declarado artículo de fe.
  • Año 1854: La inmaculada concepción de María.
  • Año 1870: la infalibilidad del Papa.
  • Año 1950: La asunción de María.
Aparte de esto existen otros conceptos erróneos, muchos de ellos relacionados con los “dogmas” anteriormente mencionados:
  • El culto de los santos y de sus imágenes.
  • La virginidad perpetua de María.
  • Los titulos marianos de “corredentora, abogada, mediadora universal de todas las gracias”, etc.
  • El rezo del rosario, imposición de escapularios, etc.
  • Las indulgencias.
  • Nosotros creemos en la presencia real del Señor Jesucristo en la Eucaristía, como también afirmamos que esta es una actualización del sacrificio del Calvario (En cada Eucaristía somos contemporáneos de Juan y María a los pies de la Cruz, en un “tiempo fuera del tiempo”), pero no aceptamos que sea una repetición incruenta o un re-sacrificio. Tampoco aceptamos que se niegue el cáliz al pueblo.




(Pablo Claudio Salvato
  domingo 10/05/2015)

¿Piedras Vivas?


"Acerquémonos a ÉL, Piedra Viva, deshechada de los hombres, pero para Dios escogida y preciosa. Como Piedras Vivas sean edificadas como Casa Espiritual y Sacerdocio Santo, para ofrecer sacrificios aceptables a Dios por medio de Jesucristo”. (1° Pedro 2:4-5).

¿PUEDEN LAS PIEDRAS TENER VIDA?
¡Sí! Cada piedra sin vida, seca, árida, dura, rocosa, pesada, sedienta que se acerca a Jesús, la Piedra Viva, será convertida en una Piedra Viva, que junto a otras Piedras Vivas, escogidas y preciosas para Dios, son edificadas como Casa Espiritual, Sacerdocio Santo, para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de Jesús.
¡Estas piedras reciben Vida gracias al Señor Jesús!
Pero lo que es precioso y de gran valor para Dios no lo es para los hombres, hombres que son “piedras muertas o sin vida”, que no quieren acercarse a Jesús, la Piedra Viva, porque no creen que Él es el ÚNICO CAMINO para llegar al Padre Celestial. No creen que Dios sólo acepta sacrificios espirituales por medio de Jesucristo. Pero no sólo NO CREEN en Jesús, sino que peor aún, ¡lo DESHECHAN como Piedra Viva!
¿CÓMO SE EDIFICA LA CASA ESPIRITUAL?
Las Piedras Vivas que se acercan a Jesús, la Piedra Viva, y lo sirven en Justicia, Gozo y Paz en el Espíritu Santo, agradan a Dios y unánimes a una voz le glorifican. (Rom. 14-15). Se ANIMAN unas a otras y se EDIFICAN mutuamente. (1° Tesalonicences 5 :11). La edificación es mutua y permanente, por eso SIEMPRE las Piedras Vivas DEBEN acercarse a La Piedra Viva Jesús. El texto de Pedro es claro: “ACERQUÉMONOS”. Cada Piedra Viva debe estar siempre cerca de Jesús, para que la Casa Espiritual sea edificada. Algunas van a ser pastores, otras evangelistas, otras maestros, etc.
Las Piedras Vivas edificadas como Sacerdocio Santo ofrecen sacrificios aceptables a Dios por medio de Jesucristo.


¿EN QUÉ CONSISTEN LOS SACRIFICIOS?
En Hebreos 15:15-16 leemos:
“OFREZCAMOS SIEMPRE A DIOS POR MEDIO DE JESÚS, SACRIFICIO DE ALABANZA, es decir, fruto de labios que confiesan su Nombre
Y de HACER BIEN y de la AYUDA MUTUA, no se olviden, porque de tales sacrificios se agrada Dios”

“ACERQUÉMONOS a Jesús, la Piedra Viva, Preciosa y Escogida de Dios, deshechada de los hombres…”

PIEDRAS VIVAS… Tremendo milagro de Dios si eres una Piedra Viva. Pero hay un Mandato para las Piedras Vivas: “ACERQUÉMONOS”. Si eres una Piedra Viva DEBES acercarte a Jesús.
Piedra Viva: ¿Te alejaste del Señor Jesús y estás sedienta, a punto de resquebrajarte, desmenuzarte? O, tal vez, todo lo contrario, ¿te estás endureciendo como una roca?
Entonces, urgente, ¡debes acercarte a Jesús! Él es la Piedra Viva, no hay, no existe otra Piedra Viva. No te vuelvas atrás, a la montaña de donde saliste, tu lugar ya fue ocupado por otra piedra muerta o sin vida. Eres una más, No importa el lugar que ocupabas. No te vuelvas a las piedras que por fuera parecen preciosas, valiosas, codiciables, pero por dentro están ¡muertas o sin vida! Siguiendo junto a ellas a líderes religiosos amados y aprobados por el mundo, por los hombres, que les predican lo que quieren oir, pero que deshechan a la Piedra Viva que es Jesucristo.
Acércate a Jesús. Si te alejaste, ¡regresa! En la Casa Espiritual de Jesús, tu lugar quedó vacío. Hay un enorme hueco que otra Piedra Viva no puede ocupar. Jesús te necesita para edificar a otros con los dones que el Espíritu Santo repartió a cada Piedra Viva. ¡Y tú también debes ser edificado por otras Piedras Vivas!
Acércate a Jesús. Él es la Piedra Viva. Pídele perdón por tus pecados y Él te perdonará al instante. Lee la Biblia, la Palabra de Dios Viva y Eficaz. ¡Sólo la Biblia! Reúnete con otras Piedras Vivas, no con piedras religiosas, o muertas o sin vida. Reúnete con el fin de alabar, adorar a Dios, testificar cuán grandes obras ha hecho en tu vida el Señor Jesús y para edificarse mutuamente.



“Jesucristo, el testigo fiel, el primogénito de los muertos y el soberano de los reyes de la tierra. Al que nos amó y nos lavó de nuestros pecados con su Sangre Preciosa y nos hizo reyes y sacerdotes para Dios, el Padre, a Él sea la gloria e imperio por los siglos de los siglos. Amén.”

“He aquí que viene con las nubes y todo ojo le verá”. (Apocalipsis 1:4-9).  











(Elena Sanfilippo Ceraso
     jueves 15/10/2015)

sábado, 10 de octubre de 2015

¡Noticia de último momento!



P:Periodista. J:Jesús. N:Narrador. L:Líderes.

P. -Radio Mundial informa: ¡Tenemos una primicia! ¡Noticia de último momento! Nos acaban de confirmar en exclusiva para Radio Mundial que Jesús se reunirá con los máximos líderes mundiales en un Encuentro Ecuménico, hoy a las 13 horas en Asís, Italia. Nuestros enviados especiales ya están haciendo guardia para tener informada a la población mundial de este hecho que más que histórico, diríamos que es... “¡sobrenatural!”

N. -Jesús descansó en el hogar de cristianos muy fieles. Se levantó muy de mañana, cuando aún estaba oscuro. Salió y se fue a un lugar muy tranquilo . Y allí oraba.


Más tarde vino un discípulo a buscarlo y le dijo:
-Señor, ya es la hora.

J. -Sí, vamos a la Reunión Ecuménica para que predique allí también.

N. -En el camino le siguió mucha gente y como tuvo compasión de ellos los sanaba de toda dolencia y les echaba fuera demonios. Ya en la reunión, parado frente a los más altos líderes religiosos del mundo, muy sabios todos ellos y con muchos títulos obtenidos en las Universidades más prestigiosas, era interrogado, se podría decir, que con malicia.


L. -¿Quién eres? ¿A qué has venido? ¿Qué buscas? ¿Cuál es tu proyecto? ¿A quién va dirigido? ¿De cuánto dinero disponés y cuánto vas a necesitar para implementarlo?.

J. -Yo soy Jesús. El Padre Celestial me ha enviado para que todo aquel que en Mí cree, no se pierda sino que tenga Vida Eterna. Recuerden Juan 3:16. Nací de María, una simple jovencita que aceptó ser la sierva de Dios para que pudiera llevar adelante su Plan de Salvación del hombre. José, mi padre adoptivo, de quien no se habla mucho, me cuidó pues quería hacer la Voluntad de mi Padre Celestial. Yo soy el ÚNICO Camino al Padre Celestial. Él y Yo UNO somos. MI REINO NO ES DE ESTE MUNDO.
Vine a buscar a los pecadores, no a justos; a los enfermos, no a sanos; a los simples, no a sabios; a los excluídos, a los pobres, a los humildes, a los sedientos, a los que “no son” ni existen para el mundo.
Predico que el Reino de Dios se ha acercado a Ustedes y que tienen que arrepentirse de sus pecados para heredar la Vida Eterna, pues el que no naciere de nuevo no puede ver el Reino de Dios. El Cielo y el infierno son reales, ¡existen! Yo soy el Cordero de Dios preparado desde antes de la fundación del mundo y entregué mi vida para darles Vida Eterna, el perdón de pecados y en la Cruz del Calvario derramé mi Sangre. Resucité al tercer día y ascendí a mi Padre Celestial. Regresaré a buscar a mi Iglesia aborrecida por el mundo, quien también me aborrece a mí. Todo lo que pidan al Padre en Mi Nombre, Yo lo haré. El que me ha visto a Mí ha visto al Padre. Aquellos que me reciban son hechos Hijos de Dios y mis Hermanos Pequeños. Vendrán conmigo donde Yo esté.


P. -Se escuchan los gritos de los líderes religiosos:
-¡Blasfemo! ¡Fuera de aquí!
El mundo entero mira atónito por los distintos medios de comunicación y muchos en persona, lo que está ocurriendo en el interior del recinto en Asís. Algunos se asombran, otros se avergüenzan y existen los que ejercen Fe en Jesús. La población mundial sale de sus casas e inunda las calles. Se están produciendo desbordes inesperados. Pero volvamos al recinto, ¿qué está haciendo Jesús?

J. -Vengan y toquen. Vean que yo soy Jesús el crucificado y resucitado. Mi Palabra es Verdad.


L. -¿Qué es esto? ¿Estás loco, Jesús? ¿Te creés Enviado de Dios? No, así no se puede seguir. ¡Guardias, sáquenlo de aquí! Está alborotando al mundo entero. Casi todas las religiones tenemos en común la Ley moral, la ética, que el hombre se salva por las buenas obras. Sus fundadores quisieron alcanzar para sus pueblos el mayor bien posible. Todos tenemos el mismo Dios, ¿de qué ÚNICO Camino al Padre hablás? Nos está costando mucho esfuerzo alcanzar la “Paz Mundial” con un Nuevo Orden de Gobierno Mundial. ¿Qué querés, traer DISENSIÓN en el mundo?

J. -Sí, he venido a traer “disensión” en la familia y en el mundo. Fuego vine a echar en la tierra. No he venido a dar Paz sino “disensión”. Les digo que si no se arrepienten perecerán todos.


L. -El Jesús que todos nosotros conocemos es un profeta más, es un maestro más, que nos enseña a hacer buenas obras, a amar al prójimo. ¡Ése no eres tú! ¡Eres un impostor! ¡Fuera de aquí! ¡Te echaremos en la cárcel! ¡No tenemos nada de qué arrepentirnos en tu Nombre! Somos religiosos, Dios está siempre con nosotros porque cumplimos su Ley. Cada pueblo tiene su Libro Sagrado de acuerdo a su religión y practican los rituales que Dios les manda para agradarle. Y acá venís vos con el tema de tu muerte redentora, que en tu Nombre hay ¡perdón de pecados!, que tu Sangre nos limpia de todo pecado, tu Resurrección, etc
Eso que vos predicás lo creen solamente ALGUNOS en el mundo. Son los cristianos, esos que leen y practican la Biblia y la consideran el único Libro de Dios. ¡Mentira! ¡Hay muchos libros de Dios! Y todos debemos compartirlos, intercambiarlos, rezar con ellos. Todos ellos elevan a la persona y le enseñan valores para vivir mejor, si se ezfuerza. Tenemos por costumbre orar todos juntos a Dios, cada uno en el nombre de quien quiera y cree. Lo hemos decidido, no te podés quedar con nosotros, porque no aceptás ser uno más. Acá todos somos iguales. Vamos a alcanzar la completa paz mundial cuando quitemos del mundo a tus discípulos, nunca están de acuerdo con lo que nosotros enseñamos, ¡son capaces de dar su vida por vos! ¡Son locos! Ellos, igual que vos, provocan disensión en el mundo.

J. -¡Es necesario que nazcan de nuevo! ¡Guías ciegos que guían a ciegos!

N. -Y así, otra vez, los líderes religiosos, llenos sus ojos de codicia por el poder político y religioso en el mundo, acusándolo nuevamente de blasfemo, mentiroso, loco, brujo, mago, malhechor, buscaron sacarlo afuera para matarlo. Nuevamente se repitió la misma escena que narran los Evangelios. El mundo aborrece a Jesús, las religiones aborrecen a Jesús, las tinieblas, la muerte, el odio, aborrecen a Jesús: la Luz, la Vida, el Amor. El diablo aborrece a Jesús. El mundo y el diablo aborrecen a Jesús y a sus discípulos. Nuevamente, el príncipe de este mundo, gobernando las mentes de sus “siervos”, los líderes religiosos ecuménicos, intentó matar a Jesús: el Autor de la Vida, el Salvador, el Rey de Reyes y Señor de Señores. Pero el Reino de Jesús no es de este mundo y sólo sus discípulos son Ciudadanos Celestiales de ese Reino, pues lo recibieron como Salvador Personal y Señor de sus vidas.


J. -Ustedes son semejantes a sepulcros blanqueados, por fuera se muestran hermosos pero por dentro están llenos de huesos muertos y de toda inmundicia. ¡Serpientes, generación de víboras! ¿Cómo escaparán de la condenación del infierno?

P. -¡Qué lío! ¡Quieren apresar a Jesús! ¿Qué? ¡No puede ser! ¡Desapareció! Afuera igual que adentro, se produjeron grandes disturbios. En todo el mundo se acrecentó la persecución contra los cristianos. Por eso, desde esta Reunión Ecuménica, muchos discípulos se volvieron atrás. ¡Trae muchos problemas seguir a Jesús!


N. -Jesús, muy triste, le habló a un reducido grupo de discípulos así:

J. -¿Quieren acaso irse también ustedes? Y uno de sus Pequeños le respondió:

Discípulo. -Señor, ¿a quién iremos? Sólo Tú tienes Palabras de Vida Eterna. (Juan 6:68).

*     *     *     *     *

Sí, un reducido grupo de discípulos, “niños”, “pequeños” de Jesús le dio lugar, abrigo a Jesús en sus casas, aún a costa de perder sus vidas. Saben que Él ya tiene moradas preparadas para ellos en su Reino.

MEDITA:
Tú, ¿qué harías?:
-¿Le abrirías la puerta de tu casa a Jesús? ¿Y a sus discípulos? Jesús dijo: “El que recibe a uno de estos “pequeños” a Mí me recibe”.

-¿O te someterías al Nuevo Orden Mundial siendo un buen “religioso” para vivir tranquilo?.

¿Crees que a Jesús le darían el Premio Nobel de la Paz?.






(Elena Sanfilippo Ceraso
    lunes 05/10/2015)